Protectores diarios: aliados confiables para la higiene femenina

El flujo vaginal es un elemento natural y cotidiano en la vida de cada mujer. Normalmente es un líquido trasparente que se va formando en distintas partes del aparato genital interno y está constituido por secreciones glandulares, trasudación de la pared vaginal y desechos bacterianos y celulares. Gracias a su presencia la mucosa vaginal tiene una lubricación permanente de modo que las paredes no se adhieren entre sí y no se resecan.

Además, es la primera barrera que se opone, seriamente, a las infecciones, por lo tanto, evita que los microorganismos lleguen hasta el útero o las trompas de falopio y causen complicaciones serias en el aparato reproductor femenino. 

Por ello la  mujer debe prestar atención especial a la higiene íntima y al cuidado de los órganos genitales, pues es una zona delicada y a pesar de que cuenta con su propio sistema de limpieza natural, es necesario reforzarlo con el uso de mecanismos de higiene femenina como las duchas vaginales (previamente indicadas por el ginecólogo), jabones especialmente formulados y los protectores diarios, entre otras opciones.

Para el aseo íntimo existen algunas medidas básicas:
Las rutinas de limpieza son suficientes llevarlas a cabo una o dos veces al día, pues la vagina misma produce sustancias que sirven para limpiarla constantemente y mantenerla libre de bacterias.

Usar preferiblemente algún jabón hecho especialmente para ello, debido a que el  jabón de tocador posee pH alto  e inadecuado para la zona.

No utilizar desodorantes vaginales, ya que estos, al eliminar posibles malos olores, pueden, asimismo, ocultar olores que pueden ser avisos de una infección vaginal.

Frescura y comodidad diaria
Los mecanismos femeninos que se utilizan con mayor frecuencia para la higiene intima dada su protección, practicidad a la hora de transportarse; a que son suaves, anatómicos e ideales para absorber humedad y mantener la ropa interior libre no sólo de flujo, sino también, del sudor y pequeños goteos de orina, son los protectores diarios. Son más pequeños y delgados que una toalla sanitaria, están diseñados  para ofrecer frescura durante el día o el mes, sobre todo, a ese 80 por ciento de féminas que sufre de las incomodas secreciones vaginales.

En cuanto a estos dispositivos hay algunas recomendaciones y consideraciones:
•Resultan un excelente aliado en las fechas cercanas al periodo menstrual, pues funcionan como medida preventiva ante cualquier “bajón inesperado”.  Igualmente, son aconsejables para evitar que el flujo manche.
•Se debe elegir el protector que resulte más cómodo de usar y para ello es necesario probar varios modelos tamaños y formas, entre la gran variedad de protectores que existen:  regulares, largos, tanga, con o  sin fragancia.
•El protector debe ser cambiado al menos dos veces al día, y en época de mucho calor se recomienda aumentar la frecuencia de cambio.
•Si se tiene una piel sensible es recomendable utilizar protectores con cubierta respirable debido a que no poseen el plástico protector que va adherido a la panty.
•Hay protectores con fragancia y se cree que pueden ocasionar irritación. Esta aseveración es falsa, pues la fragancia va colocada en la pega del sistema adhesivo que está en contacto con la ropa interior y nunca entra en contacto con el cuerpo. 
•Para evitar molestias y la reproducción de hongos y bacterias, a causa de la alteración del pH de la vulva,  se sugiere usar protectores con cubierta de tejido suave, no plástica.

Los hábitos de limpieza del área genital y corporal son muy importantes tanto para la salud como para la imagen personal.  Para encontrar el método de higiene intima que más se adapte a las necesidades de cada mujer y garantizar la salubridad, es importante que los mismos sean aprobados por ginecólogos y consultar con dichos especialistas cualquier duda relacionada con el aseo y cuidado íntimo.

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