“Corresponsabilidad de los padres y los hijos”

En términos generales la corresponsabilidad familiar responsabiliza a todos los miembros que constituyen la familia a fin  de vivir bajo los principios básicos de igualdad, respeto y responsabilidad compartida .Esto como garantía a que los hijos se formen como ciudadanos responsables y puedan reproducir ese modelo de corresponsabilidad con la sociedad y su futura familia.


La ley orgánica de protección del niño y el adolescente (LOPNA) define muy claramente los derechos y deberes de los niños y adolescentes y el papel que juega la familia, el estado y la sociedad.

Claramente se describe el papel de la familia como la  “responsable de asegurar a los niños y adolescentes el ejercicio y disfrute pleno y efectivo de sus derechos y garantías. Donde el padre y la madre tienen responsabilidades y obligaciones comunes e iguales en lo que respecta al cuidado, desarrollo y educación integral de sus hijos. El estado debe asegurar políticas y programas y asistencia apropiada para que la familia pueda asumir adecuadamente esta responsabilidad, y para que los padres y las madres asuman, en igualdad de condiciones, sus responsabilidades y obligaciones.”

Como psicopedagoga se lo arduo que ha sido orientar a la familia venezolana  en el cumplimiento de esta obligación es por ello que a lo largo de mi carrera he orientado a los padres, representantes y responsables de los niños a entender, a conocer y analizar como es el proceso de distribución, contribución, en torno al trabajo y la vida familiar. Ayudarles a entenderse que como padres tienen el mismo derecho e igualdad de responsabilidades con sus hijos. A entenderse que papá es complemento de mamá y viceversa. También se les orienta a como motivar a sus hijos e hijas a conocer las múltiples responsabilidades y tareas de los padres y que ellos conozcan la de sus hijos, a redefinir las tareas y obligaciones de los padres y los hijos dentro del núcleo familiar,  a entenderlas sensibilizarse  y a respetarlas, sin menospreciar las responsabilidades de cada quien e incluir también dentro de esas responsabilidades las que tienen las personas que forman también parte dentro ese núcleo familiar tales como personal do
mestico, abuelos entre otros.

Así mismo en Pro de entender y fomentar esta corresponsabilidad se orienta a la familia a mejorar sus actitudes y habilidades de comunicación para favorecer la convivencia en un clima de respeto, colaboración y responsabilidad compartida, trabajo en equipo.

Es importante tomar en cuenta que dentro de la corresponsabilidad familiar se debe fomentar el establecimiento de autoridad y la disciplina asertiva esa que se hace desde la firmeza y el cariño afectivo.

En otras palabras la responsabilidad familiar es el deber de los padres de velar por la vida y salud de los hijos. Tenerlos a su lado, alimentarlos, educarlos y brindarles una formación integral. Y el deber de los hijos de honrar y respetar a sus padres, respetar los derechos y garantías de las demás personas, cumplir sus obligaciones en materia de educación. Por lo tanto es corresponsabilidad familiar conjugar esos deberes y derechos a fin de mejorar las relaciones de sana convivencia, apoyo intrafamiliar dentro de cada familia.

Las tareas escolares  tienen como objetivo desarrollar el sentido de responsabilidad de los niños, lo cual se promueve dándoles deberes y haciéndolos responder por su debido cumplimiento. Es aquí donde el contexto escolar participa como formadora y orientadora de ese proceso de formación integral acompañando a esos hijos y a la familia.

Las tareas tanto escolares como las familiares ayudan  a que los niños aprendan a organizarse; promueven el desarrollo de la disciplina, el compromiso y la precisión; en el caso que sean tareas escolares les sirven para practicar lo aprendido en clases: les ayuda a adquirir hábitos y métodos de estudio, además, cultivan rasgos como la independencia y el manejo del tiempo.

Ahora bien la realidad muestra que desde muy temprano nuestros niños tienen agendas colmadas de actividades extra, sus responsabilidades van mucho más allá de cumplir con las tareas escolares y el tiempo para jugar casi no existe. Por ello es importante conocer la distribución de esas actividades y ayudar a precisar las prioridades en los niños. Todo padre desea que su hijo sea exitoso, también es cierto que los ambientes son cada vez más desafiantes, sin embargo es recomendable averiguar que es lo que realmente desea el niño, y si el sinfín de actividades que debe realizar ese niño verdaderamente colabora en su formación como individuo integral. Quizás estemos como padres contribuyendo a crear una persona estresada e insegura.

“Llenar el programa extraescolar del niño y del adolescente con excesiva cantidad de actividades dirigidas podría resultar tan negativo como dejarlo toda la tarde sin hacer nada productivo. “Es tarea de padres encontrar, conjuntamente con el protagonista, un equilibrado punto medio”

Las tareas escolares no es, precisamente, la actividad favorita de los pequeños ni de las familias en general, por ello, se recomienda “no obligar al pequeño a realizar algo para lo que no este preparado, porque carece de estrategias y porque está solo, es decir, cuando no cuenta con un adulto que lo asista y le brinde su apoyo, tanto afectivo como intelectual.”

Es importante tener en cuenta el tiempo de dedicación para cada etapa escolar:
•Entre kinder y tercer grado de ciclo básico, la mayoría de los niños no deberían dedicarse a las tareas escolares más de 20 minutos por día durante la semana.

•Entre cuarto grado y sexto grado de ciclo básico, se recomienda 40 minutos por día.

•Para los estudiantes de séptimo grado de ciclo básico a primero de diversificado, se considera conveniente, por lo general un máximo de dos horas al día, cinco días a la semana.

Las tareas deben representar para los padres información acerca de lo que están aprendiendo sus hijos y conocer más el colegio al cual ellos asisten, pero también es importante destacar que a través de las tareas se presenta una ocasión ideal para que los adultos demuestren que pueden apoyar a los pequeños, que son sus guías también en el plano educativo, y ello puede mejorar la comunicación.

Casi todos los niños deben saber que para su familia es sumamente importante y valioso el aspecto educativo, esto los motiva hacer mejores estudiantes, a cumplir con sus tareas y responsabilidades por que entienden que esto es parte de su formación y su éxito en su vida.

Cuando nuestro hijo es de esos hijos que disfruta su independencia, es un niño cuyas habilidades académicas y su capacidad de organización le permite trabajar autónomamente  en cualquier tarea. Debemos  respetar ese proceso, pero lo común es lo contrario por ello lo primordial es hacerles saber que pueden arreglárselas bien con sus tareas. Hay que ayudarles a descifrar las instrucciones, a localizar la información, una ves que los niños entienden la tarea pueden funcionar por si solos.

Es importante que como familia inculquemos desde muy temprano los hábitos bien como los de aseo, sueño y alimentación, para que así los subsiguientes hábitos se instauren de manera más sencilla, sabiéndolos que son deberes que se deben aceptar como parte de la rutina diaria. Tales como asearse todos los días, ordenar mi cuarto antes de salir, cepillarme entre otros.

Es importante que se le explique al niño para que sirven la tareas.Se debe fijar un horario y un lugar para hacer las tareas cada día, Nuestro papel como padres es el de orientador, no hacedor de tareas, hay que buscar lo positivo de las tareas y evitar las criticas, hay que revisar las tareas y los deberes no corregirlos, tenemos que fomentar en casa y en el colegio el uso de la agenda escolar como planificador y control de actividades.

Cuando el niño se niegue a cumplir con los acuerdos, deberes o normas se debe acudir inmediatamente a la suspensión de privilegios, ser constantes, y llevar al niño a asumir su falta de responsabilidad en el colegio o en el hogar.

Pero para ello con anterioridad de debe conocer los privilegios de los hijos, cumplir con la firmeza y ser asertivos con la autoridad.

Es también importante recordar que lo más importante del niño es sentir que usted como padre lo quiere y guía, Ciertamente no todos los padres tenemos la misma disposición y paciencia a la hora de apoyar a nuestros niños con las tareas y muchos tampoco tenemos el conocimiento, entonces nos llenamos de miedo, frustraciones, recuerdos, experiencias,  y todo ello contribuye a entorpecer la sana  relación con nuestros hijos y la convivencia en el hogar, las tareas se vuelven detonantes en casa de conflictos y disputas de poder entre usted su pareja o el docente. Cuando es así entonces se debe acudir al especialista para determinar cual es la mejor ayuda que necesita su representado y de esa manera hacer del proceso de aprendizaje mucho más asertivo y efectivo.

En muchas ocasiones los sentimientos e inconvenientes que siente usted en relación a la realización de las tareas escolares  son también correspondidos por las docentes  y tendrán mucho que ver con las necesidades y requerimientos necesarios para abordar situaciones de aprendizaje específicas.

Como docentes debemos también tomar en cuenta que una tarea escolar debe tener un propósito y un fin de aprendizaje nunca debe ser un castigo, debe tomar en cuenta el tiempo de dedicación para las actividades que asigna, asi mismo debe ser un docente proactivo y motivante, debe reconocer el esfuerzo de cada uno de sus alumnos , las actividades que asigna deben ser creativas, y claras de comprender, y deben ante todo usted  comunicarse constantemente con sus representantes a modo que el cumplimiento de las tareas escolares se conviertan en una triada de responsabilidades COLEGIO-NIÑO-HOGAR.

Recuerde como padre que obviamente, a medida que el niño crezca estas ayudas cambiarán y se convertirán en tareas de supervisión, para ello es importante que se mantenga la responsabilidad y el gusto para realizar las asignaciones académicas a lo largo de la vida.

Lo más importante es recordar que la clave del éxito en la educación, y en cualquier aspecto de la formación de un infante, es demostrarle disposición, dedicación y afecto, y además nunca olvidar que los valores se forman en el hogar. “Así cuando ese niño crezca y se convierta en un adulto, podría encontrarse dentro de un ambiente muy contaminado, pero le hará frente de manera correcta, partiendo de los principios que vio en casa de pequeño.

¿ NO ES ESTÁ LA TAREA MÁS IMPORTANTE QUE TENEMOS COMO PADRES.”?                       

Lic. ENZA PETRAGLIA, PSICOPEDAGOGA   0412-3337011, 0212-9935303