El 7 y 8 de noviembre en Bogotá, Colombia, se congregaron representantes de Estado, ONG, Sociedad Civil, víctimas y sobrevivientes. Se vieron expertos de 119 países, incluído un representante de Venezuela que decidió no adherirse a los tratados propuestos.
En la conferencia mundial, distintos Estados se solidarizaron con los adolescentes detenidos en las cárceles venezolanas. Las madres denunciaron que están siendo víctimas de violencia sexual y otras formas de tortura. Es información que está confirmada y denunciada por la Misión Internacional de la ONU en Venezuela, en su informe publicado en octubre.
Parte de los temas abordados a lo largo de la conferencia incluyeron el llamado a la acción contra la violencia a sexual a niños, niñas y adolescentes. Fue en ese espacio que los participantes exigieron la liberación y justicia para los adolescentes detenidos aún en las cárceles venezolanas sin garantías del debido proceso, víctimas de detenciones arbitrarias y con meses acumulados de tratos inhumanos.
