La Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC) del Departamento del Tesoro de Estados Unidos emitió recientemente la Licencia General N.º 40D, que permite a Petróleos de Venezuela S.A. (PDVSA) y entidades bajo su control la entrega y descarga de gas licuado de petróleo (GLP) en Venezuela hasta el 5 de septiembre de 2025, siempre que el cargamento haya sido embarcado antes del 7 de julio de 2025.
Esta licencia autoriza únicamente las transacciones «ordinariamente incidentes y necesarias» para la entrega del GLP en territorio venezolano, excluyendo pagos en especie con petróleo o derivados y operaciones con personas bloqueadas fuera del control estatal venezolano. Además, mantiene la presión estructural sobre PDVSA y la economía venezolana, pues no implica un levantamiento general de sanciones, sino una autorización puntual y temporal con fines humanitarios para aliviar la crisis energética que afecta a la población.
La licencia 40D representa un permiso limitado y temporal para que PDVSA pueda operar en la importación y descarga de gas licuado en Venezuela, en medio de un régimen de sanciones que sigue vigente y restringe otras transacciones con la estatal petrolera.
