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El presidente Donald Trump confirmó que bombarderos furtivos B-2 Spirit de la Fuerza Aérea de Estados Unidos llevaron a cabo un ataque aéreo exitoso contra tres instalaciones nucleares clave en Irán: Fordow, Natanz e Isfahán. La operación representa una escalada significativa en el conflicto que se intensificó hace una semana con ataques israelíes en territorio iraní.

El B-2 Spirit, desarrollado por Northrop Grumman, es el único bombardero en el mundo capaz de transportar y lanzar la bomba antibúnker GBU-57/B Massive Ordnance Penetrator, que pesa 13.600 kilogramos y está diseñada para destruir objetivos subterráneos fuertemente protegidos como la planta de Fordow, ubicada bajo una montaña y capas de concreto. Esta munición convencional de alta potencia puede penetrar hasta 60 metros de tierra o roca antes de detonar, garantizando una precisión milimétrica gracias a su guía por GPS.

El diseño furtivo del B-2, que combina un perfil aerodinámico especial con materiales que reducen su firma radar, le permite penetrar el espacio aéreo enemigo sin ser detectado. Con capacidad para transportar hasta 18 toneladas de armamento y volar más de 11.000 kilómetros sin repostar, el B-2 puede ejecutar misiones intercontinentales de gran alcance y regresar a su base sin necesidad de escalas.

Trump destacó en sus redes sociales que todos los aviones regresaron sin incidentes y felicitó a las fuerzas armadas por la operación, calificándola como un “momento histórico” para Estados Unidos, Israel y el mundo. La Casa Blanca no ha ofrecido detalles adicionales sobre el tipo exacto de munición empleada, pero se estima que la GBU-57 fue la principal arma utilizada.

Este ataque marca la primera intervención directa estadounidense en el conflicto entre Israel e Irán y envía un mensaje claro sobre la capacidad y disposición de Estados Unidos para actuar con precisión y fuerza sobre objetivos estratégicos en la región. La operación también refleja la estrecha coordinación con Israel para neutralizar el programa nuclear iraní y limitar su capacidad militar.

El presidente Trump tiene previsto ofrecer un discurso a la nación para ampliar detalles sobre la ofensiva y las próximas acciones en esta crisis que mantiene en vilo a la comunidad internacional.

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